Datos
TITULO: “C. EL PEQUEÑO LIBRO QUE AÚN NO TENÍA NOMBRE”
AUTOR: José Antonio Millán
Fecha: 25 de noviembre de 2011 – 17:00 horas
LUGAR: C.P.E.I.P. “García Galdeano” – PAMPLONA
Iniciamos con esta la primera de las tertulias del curso. Al igual que en años anteriores, nos hemos reunido para comentar nuestras impresiones sobre esta lectura, prestada por la Biblioteca CIVICAN.
Participantes
PROFESORES: Alegría, Lorenzo, Javier (tutores de 5º y 6º), Estrella (profesora de inglés) y Amaya (orientadora del centro).
FAMILIAS: Alumnos de 6º y de Primero de E.S.O. (antiguos alumnos del curso pasado), con sus familiares (padres, madres…). No han podido asistir, por diversos motivos, los alumnos y familiares de quinto, pero esperamos se incorporen en la próxima edición.
OBSERVADORES (invitados): ÁLVARO Y NIEVES (del colegio Virgen Blanca de HUARTE).
Desarrollo de la sesión
Como siempre, iniciamos la tertulia dando la palabra a los alumnos, solicitando que empiecen por resumir el argumento de esta pequeña historia:
MAIDER BLANCO: Es la historia de un libro que se pregunta desde el principio por qué no crece. Visita todas las estanterías de la biblioteca buscando quien le pueda responder.
IRATI: Al final ya sabe el por qué. En su viaje disfruta de una aventura. Va conociendo muchos amigos y, sin darse cuenta, va construyendo y escribiendo su propia historia.
CRIS: Quiere buscar la enciclopedia, que supone que contiene todo el saber. Le dice a su cuidadora que se va a los cómics. Posteriormente, al desaparecer, lo tienen que buscar.
JAVIER: Comenta que contaban de 16 en 16 y que, curiosamente, los libros se imprimen de 16 en 16 hojas.
MILENA: Me gustó cómo van sucediéndole aventuras por su interés para entender por qué no crece.
PATRICIA: Mientras no llegas a mayor, hemos estado hablando, puedes decidir sobre lo que harás en el mundo.
ARITZ: Es un libro aburrido. Si tuviera que continuar la historia incluiría animales.
MILA (MADRE DE FRAN CHAMORRO): El libro es la vida misma. Los padres continuamente se preocupan por lo que puede llegar a ser la vida futura de sus hijos. Cuando aparecen los abuelos, ya no es para tanto. Disfrutan de la relación con los nietos, pero el futuro es más la preocupación de los padres.
LORENZO: Efectivamente, hay un paralelismo entre la historia del libro y la evolución de un niño, en cuanto que los padres e incluso los abuelos se preguntan qué puede llegar a ser de mayor. Muchos niños se plantean qué pueden ser de mayores, a veces, con cierta preocupación.
TERE (MADRE DE IRATI): También es curioso, pero parece muy actual: la madre no estaba en casa, y no podía atender al “libro-niño”. No podía responder a sus dudas.
MILA: Es un libro fácil de leer y complicado para sacar conclusiones.
MAITE (MADRE DE NAROA): A mí personalmente, que reconozco todas estas cosas que comentáis, sin embargo no me ha enganchado como otros.
KATIUSKA (MADRE DE MILENA): Es un libro contradictorio. Mientras el protagonista quiere satisfacer sus dudas, los personajes con que se encuentra parecen excesivamente listillos. Y él insiste: ¿Por qué no crezco?
OLGA (MADRE DE MAIDER): Me gustó ese párrafo de preguntas estúpidas: ¿A quién quiere más, al abuelo o a la abuela…? Finalmente decide por sí mismo lo que va a ser: un cuento.
MAIDER (1º E.S.O. ): Expresa su admiración por el ilustrador del libro: Con trazos muy simples es capaz de mostrarnos la diferencia entre un libro maduro y un libro “pequeño”. Lo hace muy bien. Sin dejar de representar libros, les pone emociones, expresiones… Le ha encantado su trabajo.
MERTXE (MADRE DE PATRICIA): Efectivamente, el libro es como la vida misma. Se ve reflejado en cualquiera de las páginas. El libro se encuentra con todo tipo de personalidades, pero él es un “niño libro”. Los abuelos aparecen cuidando a los niños.
Y el colegio… ya quisiéramos de niños tener un colegio así: solo dos días a la semana con clase.
MILA: De cada libro se aprende algo.
KATIUSKA: Me pregunto qué hubiera pasado con él si llega a quedarse con el autor…
ESTRELLA: El autor, es verdad, estaba sentado al ordenador. Ya no era la escritura clásica que nos representamos cuando pensamos en un creador. ¿Nos estaba mostrando ahí el propio final del libro como tal? La aparición de diferentes sistemas, los libros electrónicos, el cine, la televisión, internet, los blogs… ¿Estamos asistiendo al final del libro tal como lo conocemos?
Pensamos en un destino para nuestros hijos, y sin embargo casi siempre ese destino y la realidad son totalmente distintos. El hijo llega a su madurez y decide por sí mismo.
ALBERTO (PADRE DE CRIS): Es nuestra vida reflejada en un libro. El libro de esta historia está, igual que el niño, en formación continua. Su destino es que tarde o temprano deje de ser gobernado. Siempre está evolucionando. Hay tantas cosas aquí de la vida misma…
MERTXE: Lo cierto es que en casa, al leerlo, teníamos la sensación de que era un rollo. Sin embargo aquí estamos enriqueciéndolo y ya nos cambia el punto de vista. Esa comparación con los padres, con los hijos… nos hace ver el texto de otra forma.
OLGA: Hay pequeños detalles. Por ejemplo el abuelo le pregunta al protagonista al final del libro: ¿Estás preocupado? –No. Pues ya vale. Va todo bien.
MILA: Respecto a lo que se ha comentado antes, a pesar de que está escrito en el año 1993, he encontrado datos sobre el autor. Trabaja en edición electrónica y para Internet. Así que no es sorprendente que reflexione sobre lo que está sucediendo en los últimos años. Los libros son el soporte ideal para leer. Pero ¿qué va a pasar?
Hay numerosas intervenciones en torno a esa reflexión…
OLGA: Salen muchos personajes del universo cercano a los libros. La fotocopia no quería saber nada, incluso ni que la conocieran…
ALBERTO: Al mismo tiempo nos dan una amplia información sobre todo lo que rodea al mundo del libro. Salen las unidades de los impresores: los cíceros. También aparecen los lepismas, bichitos que todos conocemos. Suelen andar por casi todas las casas, pero nos pasan desapercibidos. (Alberto muestra una imagen de un lepisma que casi todos reconocen).
ALEGRÍA: Todo lo que busca a lo largo del viaje de exploración es su propia identidad. De mis recuerdos de niña encuentro actitudes como lo de que ante un desconocido su reacción sea marcharse. Pasa miedos. No se atreve a definirse. La conversación con el abuelo, sin embargo, le da confianza y tranquilidad. Y cuando encuentra esa confianza, entonces es capaz de definirse. En ese momento es capaz de ponerse un nombre.
ALICIA (MADRE DE NEKANE): Tengo una sensación parecida a la que antes se ha expresado. Me pareció un libro un tanto soso. Después, aquí, me han gustado los comentarios y tengo otra sensación.
TERE: Me gusta como finaliza. El hecho de dejar todo abierto.
ESTRELLA: ¿Podríamos entenderlo también como un homenaje-despedida al libro? Si el libro tal como lo conocemos, desaparece, se romperá también esa conjunción de libro-silencio- concentración-disfrute lector.
TERE: La verdad es que en algunas cosas el ordenador le gana la partida al libro. Por ejemplo a las enciclopedias les ha comido el terreno.
MERTXE: Para mí es más cómodo el libro. Es un instrumento de lectura que forma parte de nuestras costumbres.
MILA: Prefiero un libro en muchas de las costumbres y usos. Puedo subrayar, meter mis notas y recuerdos. Me resulta más afectivo. Aún me acuerdo cómo a la edad que tienen ahora nuestros hijos, leí una obra como “La Celestina”.
OLGA: Ahora van cambiando las costumbres. Dedicas y repartes el tiempo de forma diferente.
MILA: Es cierto, en el trío Ordenador-Libro-Tele, el libro ha pasado al tercer lugar de preferencia. No termino de descubrir en los hijos esa pasión lectora que antes nos dominaba.
JAVIER: Hace referencia a la evolución histórica de la forma de leer. Cuando se sustituyeron los papiros y aparecieron los libros encuadernados, al pasar las hojas los lectores perdían el hilo.
TERE: También hay algunas cosas alrededor… Me gusta comprarlos, tenerlos… Son caros, pero sigo comprando. Enfrente tenemos los e-books, que se suponen más baratos, o que los bajas gratis de Internet.
ESTRELLA: Cada vez se presentan más dificultades para la supervivencia del libro.
MILA: Pero todavía nos cuesta cambiar.
La tertulia tuvo muchas más intervenciones, pero no pudimos recoger todas. Cumplida la hora de diálogo, procedimos a repartir el siguiente título: “Se acabó la función” de Fernando Lalana.
Tras la votación quedamos en volver a reunirnos pasadas las vacaciones navideñas.
La próxima sesión será el 13 de enero.